Error inocente o falta imperdonable? La cantante Ángela Aguilar, quien parecía estar disfrutando de su mejor momento personal y profesional, vuelve a estar en el ojo del huracán. Esta vez, no por su relación con Christian Nodal ni por las indirectas de Cazzu, sino por una frase… que le podría haber costado el cariño de un país entero.

El discurso que encendió la furia de Chile

Todo ocurrió durante la reciente entrega de premios de la revista Glamour, donde Ángela fue reconocida como “Mujer del año”. A pesar de no desfilar por la alfombra roja, su presencia no pasó desapercibida. En su emotivo discurso de aceptación, la artista dijo:

“Yo solamente quería ser cantante y gracias a ustedes lo estoy logrando. Como diría mi abuela Flor Silvestre: ‘Gracias a la vida que me ha dado tanto…’”
La frase, que muchos podrían interpretar como un homenaje familiar, desató una ola de indignación en redes sociales. ¿La razón? Esas palabras pertenecen a la legendaria canción “Gracias a la vida”, compuesta por la chilena Violeta Parra en 1966. Un himno cultural, símbolo de identidad y resistencia en Chile y América Latina.

¿Una confusión o una apropiación cultural?

Aunque Ángela quiso rendir homenaje a su abuela, Flor Silvestre —también una figura icónica en la música mexicana—, el hecho de adjudicar esa emblemática frase a ella fue visto como una falta de respeto por miles de chilenos.

La polémica escaló rápidamente, y en pocas horas el hashtag #ÁngelaNoEsBienvenida se convirtió en tendencia en X (antes Twitter) en varios países sudamericanos. En Chile, diversas figuras públicas y fans de la música de raíz expresaron su molestia por lo que consideran “una apropiación cultural y una falta de respeto al legado de Violeta Parra”.

“No se puede borrar la historia con una frase de gala”, escribió un usuario. “Esa canción no es solo una frase bonita, es parte de nuestra memoria colectiva”, expresó otro.

¿Persona non grata en Chile?

Aunque no hay una declaración oficial del gobierno chileno, varios colectivos culturales ya han pedido que se le niegue la entrada a eventos y festivales en el país austral. Algunos incluso han promovido una petición digital para vetar su participación en Viña del Mar, donde en más de una ocasión se había rumorado su posible debut.

Hasta el momento, la cantante no ha emitido ninguna declaración pública al respecto. Su equipo de prensa tampoco ha respondido a solicitudes de medios chilenos.

La tormenta mediática que no cesa

Esta controversia se suma a la larga lista de problemas mediáticos que Ángela ha enfrentado en 2024 y 2025. Desde que oficializó su relación con Christian Nodal, tras su abrupta ruptura con la rapera argentina Cazzu, la joven artista ha sido blanco constante de críticas.

Recordemos que solo 18 días después de que Cazzu anunciara el fin de su relación con Nodal, él y Ángela confirmaron su romance. La polémica se avivó cuando Cazzu reveló que nunca le informaron sobre esta nueva relación y que incluso ella había preguntado directamente si había “otra persona” en la vida de Nodal.

Además, recientemente se supo que Ángela tomó acciones legales contra el reguetonero colombiano Ryan Castro, por su canción “Fan de la relación”, la cual presuntamente se burla del triángulo amoroso entre ella, Nodal y Cazzu.

¿Premio merecido o símbolo de privilegio?

La elección de Ángela como “Mujer del año” también fue duramente cuestionada por parte del público. Más de 500 mil personas firmaron una petición para que se le retirara el reconocimiento, argumentando que no representa los valores que la revista promueve. Sin embargo, la editorial mantuvo su decisión y le otorgó el galardón, lo cual solo encendió más los ánimos.

“No es un crimen enamorarse”, decían algunos. Pero para muchos, su ascenso ha estado rodeado de silencios incómodos, discursos que no convencen y frases que, como esta última, han dejado una herida profunda.

¿Y ahora qué sigue para Ángela?

El silencio actual de Ángela Aguilar podría ser una estrategia de contención, o quizás una pausa para reflexionar sobre lo ocurrido. Sin embargo, con las redes sociales al rojo vivo y los medios internacionales haciéndose eco del escándalo, su equipo tendrá que decidir si es momento de aclarar, disculparse o simplemente dejar que el tiempo apacigüe la tormenta.

Lo cierto es que, a pesar de su talento y popularidad, el cariño del público no es incondicional, y esta frase aparentemente inofensiva podría tener consecuencias duraderas en su imagen internacional.

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