Una fotografía reveladora ofreció un vistazo a la  oficina de  Karoline Leavitt en la Casa Blanca  y mostró cómo la secretaria de prensa equilibra las exigencias de su trabajo y su maternidad.

La asistente de  Donald Trump, Margo Martin, capturó el acto de equilibrio literal de Leavitt en su oficina  el jueves y lo compartió en X.

“Entró en @PressSec escribiendo con una mano y alimentando a su hijo con la otra. ¡Supermamá!”, dijo Martin.

La secretaria de prensa, de 27 años, llevaba un vestido rosa mientras trabajaba desde su escritorio y alimentaba con  un biberón a su hijo Niko, de nueve meses  .

El chupete y el juguete de Niko estaban colocados en el escritorio, entre los papeles perfectamente organizados de Leavitt.

La  madre trabajadora  parecía estar bebiendo una bebida verde helada de Tatte, probablemente una especie de matcha. Una limonada de matcha con gas de Tatte cuesta $5.50, mientras que un latte de matcha helado cuesta $4.50 por 355 ml o $5.00 por 473 ml.

Leavitt tenía varias fotografías esparcidas por su oficina, incluyendo un recorte de ella con un vestido negro posando con Trump con un traje azul y corbata roja de la campaña electoral colocado sobre el calentador.

La secretaria de prensa, de 27 años, llevaba un vestido rosa mientras trabajaba desde su escritorio y alimentaba con un biberón a su hijo Niko, de nueve meses.

Tenía un recorte de una foto con Trump en su calefactor. Anteriormente compartió la foto (en la foto) en Instagram.

También tiene una fotografía grupal firmada con estudiantes de séptimo grado de la Academia George Walton (en la foto) pegada en su tablero de corcho.

Leavitt publicó la misma foto en Instagram el 1 de enero de 2024, con el título: “2024. ¡VAMOS! nosotros”.

En su tablero de corcho, Leavitt pegó dos fotografías de su hijo: una de ella sosteniendo al bebé en la playa y otra del bebé sentado en el asiento de un avión con una almohada con el sello presidencial.

También tiene una fotografía grupal firmada de estudiantes de séptimo grado de la Academia George Walton.

Los estudiantes de secundaria de la escuela privada de Georgia, donde la matrícula cuesta $16,065 al año, visitaron Washington, DC, en marzo.

Durante su excursión, el grupo visitó la Casa Blanca, donde conocieron a Leavitt y posaron para la foto.

Además, tiene un meme de un hombre con camisa blanca, con la mano en el cerebro, que dice: «No, gracias. No lo necesitaré. Me creo todo lo que dicen los medios tradicionales».

El lunes, Leavitt compartió una visión poco común de su vida familiar con una serie de dulces instantáneas de un viaje de fin de semana a Palm Beach, Florida, con su esposo Nicholas Riccio, de 59 años, y su hijo pequeño.

La familia pasó el fin de semana en Trump’s Mar-A-Lago y Leavitt capturó adorables fotos de la ocasión.

Leavitt compartió una visión poco común de su vida familiar con una serie de dulces instantáneas de un viaje de fin de semana a Palm Beach, Florida.

La familia pasó el fin de semana en Trump’s Mar-A-Lago y Leavitt capturó adorables fotos de la ocasión.

Una imagen mostraba a la asistente política sonriendo en un sofá verde mientras sostenía en su regazo a su hijo pequeño, que vestía un lindo mono a cuadros.

En la segunda instantánea, Riccio, 32 años mayor que Leavitt, también apareció en el cuadro mientras el trío posaba frente a una piscina al atardecer.

Leavitt capturó otra foto conmovedora de su esposo vestido de manera más informal mientras acunaba a Niko y le besaba la mejilla.

Y la imagen final de su adorable carrusel simplemente aludía a la familia relajándose en tumbonas mientras estaban envueltos en toallas.

La madre subtituló la publicación: ‘Fines de semana en Palm Beach’.