El exfutbolista y empresario Gerard Piqué ha decidido hablar después de meses de silencio, desatando una oleada de reacciones y emociones entre sus seguidores, críticos y medios de comunicación de todo el mundo.

Gerard Piqué, quien recientemente cumplió 38 años, ha estado en el ojo del huracán desde su mediática separación con la cantante colombiana Shakira, madre de sus dos hijos, Milan y Sasha.

Aunque en los últimos tiempos había preferido mantenerse al margen de los reflectores y no responder a las constantes preguntas de la prensa, en una entrevista inesperada concedida a un medio digital español, Piqué ha decidido romper el silencio sobre su presente emocional, su visión sobre la familia, la fama y las consecuencias de sus decisiones.

“Sé que mucha gente ha hablado por mí durante meses, pero ya era hora de contar mi versión”, fueron las primeras palabras que marcaron el tono de una entrevista íntima, cruda y sorprendentemente sincera.

Piqué confesó que los últimos dos años han sido los más difíciles de su vida, no por su salida del FC Barcelona o su retiro del fútbol profesional, sino por el enorme desgaste emocional que sufrió en su vida personal.

“No me arrepiento de haber sido quien fui, pero sí de no haber cuidado mejor lo que tenía”, admitió, haciendo referencia tácita a su relación con Shakira.

Aunque en ningún momento nombró directamente a su expareja, sí dejó entrever el dolor que le produjo ver su vida desmoronarse públicamente: “Ver a tus hijos en portadas de revistas, a tu familia convertida en un espectáculo global, duele. Sobre todo cuando sabes que todo lo que ocurre dentro de casa es mucho más complejo de lo que la gente se imagina”.

Uno de los momentos más impactantes de la conversación llegó cuando se le preguntó por Clara Chía Marti, la joven con la que se le ha vinculado sentimentalmente tras su ruptura.

Lejos de eludir el tema, Piqué respondió con serenidad: “Clara no tiene la culpa de nada. Ha tenido que soportar un nivel de acoso y odio que ninguna persona merece, especialmente alguien tan joven. No quiero que nadie sufra por mi pasado”.

Sobre su vida actual, Piqué aseguró estar centrado en sus proyectos empresariales, especialmente la expansión de la Kings League, su liga de fútbol 7 que ha revolucionado la forma de consumir deporte en España y Latinoamérica.

“Estoy disfrutando de construir algo desde cero. Es mi nueva pasión. Ya no necesito aplausos en un estadio, ahora quiero dejar huella desde otro lugar”, afirmó con convicción.

Además, sorprendió al revelar que está asistiendo a terapia psicológica, algo que jamás había considerado durante su carrera profesional.

“La salud mental es real. Me enseñaron a ser fuerte, a no llorar, a seguir siempre adelante, pero en algún momento el cuerpo y la mente te dicen basta. Y hay que escucharlos”, explicó.

Esta confesión ha sido celebrada por muchos en redes sociales, considerándola un ejemplo de vulnerabilidad masculina y crecimiento personal.

Otro momento emotivo fue cuando habló de sus hijos: “Lo único que me importa es que Milan y Sasha estén bien, que no tengan que cargar con nuestras decisiones. Ellos merecen una infancia feliz, sin cámaras en la puerta de su escuela”.

También reconoció que la relación con Shakira como padres ha sido complicada, pero que ambos están trabajando en mejorar la comunicación: “No somos amigos, pero sí somos padres. Y eso está por encima de todo”.

La entrevista cerró con una reflexión sobre la fama, el fútbol y el amor: “He ganado Champions, he alzado la Copa del Mundo, he tenido amores que marcaron mi vida… Pero ahora entiendo que nada de eso sirve si no estás en paz contigo mismo. Me equivoqué muchas veces, y lo seguiré haciendo, pero hoy soy más consciente de quién soy y hacia dónde quiero ir”.

Las redes sociales estallaron con miles de comentarios, muchos de apoyo y otros de crítica, como ya es costumbre cuando Piqué habla.

Pero algo es claro: este Gerard no es el mismo de antes. A sus 38 años, con el cabello más canoso y la mirada más reflexiva, ha decidido mostrarse sin filtros, humano, imperfecto y decidido a escribir un nuevo capítulo de su vida.

Y aunque el mundo seguirá hablando de él, por primera vez en mucho tiempo, parece que a Gerard Piqué ya no le importa lo que digan los demás.

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