En un dramático giro de los acontecimientos el 10 de septiembre de 2025, Elon Musk fue brevemente desplazado como la persona más rica del mundo —superado por Larry Ellison, cofundador y presidente de Oracle Corporation— tras un alza espectacular de las acciones de Oracle. Sin embargo, la brecha se cerró con la misma rapidez. Este episodio puso de relieve tanto la volatilidad del patrimonio neto en los niveles más altos como la rapidez con la que los mercados reaccionan a la IA, la computación en la nube y las publicaciones trimestrales. A continuación, analizamos en profundidad cómo se desarrolló, qué lo causó, quiénes se beneficiaron o perjudicaron, y qué dice sobre la riqueza, el poder y la percepción en las finanzas tecnológicas actuales.

El momento del adelantamiento

Ese miércoles por la mañana, Oracle sorprendió a los inversores con la publicación de unos resultados financieros que superaron con creces las expectativas. La compañía también ofreció sólidas previsiones, destacando especialmente la creciente demanda de su infraestructura en la nube y sus servicios relacionados con la IA. Los mercados respondieron de inmediato: las acciones de Oracle subieron más de un 40 % en las primeras operaciones, valorando la compañía en casi 960 000 millones de dólares. Dado que Ellison posee aproximadamente el 41 % de Oracle, su participación pareció repentinamente alcanzar un valor de unos 393 000 millones de dólares, superando por poco el patrimonio neto de Musk, estimado en unos 384 000 millones de dólares según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.

Esto marcó lo que muchos calificaron como la mayor ganancia diaria jamás registrada para el patrimonio neto de un individuo en los últimos tiempos. La riqueza de Ellison se disparó en alrededor de 100 mil millones de dólares durante la jornada bursátil, antes de que algunas de esas ganancias se redujeran.

Musk recupera el primer puesto

Al cierre del mercado, las acciones de Oracle habían retrocedido ligeramente desde sus máximos intradía, aunque aun así terminaron con una ganancia sustancial: alrededor del 36 % con respecto al cierre anterior. Esto redujo el valor total de la participación de Ellison y permitió a Musk recuperar el título de la persona más rica del mundo, una vez que el precio de las acciones de Oracle perdió parte de su impulso inicial. El patrimonio neto de Musk se mantuvo enorme, pero ese fugaz momento ilustró cómo pequeñas fluctuaciones en la valoración en la cima pueden cambiar drásticamente las percepciones y las clasificaciones.

¿Qué impulsó el auge de Oracle?

Varias fuerzas convergieron para poner a Oracle a la cabeza, aunque fuera por un breve tiempo:

Sólidos resultados financieros y previsiones. Oracle reportó ganancias superiores a las esperadas y presentó proyecciones que sugerían un crecimiento significativo en sus negocios de nube e IA. Los inversores reaccionaron tanto a las ganancias superiores como a las perspectivas agresivas.

Aumento de la demanda de infraestructura en la nube e IA. A medida que la IA sigue captando la atención financiera y estratégica en todos los sectores, las empresas que suministran infraestructura fundamental (bases de datos, servicios multicloud, potencia informática) están cosechando beneficios. Oracle, históricamente más centrada en bases de datos y aplicaciones empresariales, ha redoblado recientemente su apuesta por la infraestructura en la nube y el posicionamiento en IA. Esto reforzó la confianza en sus ingresos futuros.

Sentimiento e impulso de los inversores. La psicología del mercado jugó un papel fundamental. Cuando las ganancias iniciales de Oracle se hicieron visibles, los operadores impulsados ​​por el impulso se abalanzaron sobre el mercado, impulsando aún más la valoración. Una vez que la acción alcanzó ciertos máximos, algunas tomas de ganancias (o ventas pasivas) redujeron las ganancias al final de la sesión. Este tira y afloja impulsó la volatilidad.

La posición de Musk y por qué la perdió brevemente

Elon Musk, CEO de Tesla y SpaceX, ha visto la mayor parte de su fortuna ligada a las acciones de Tesla. Si bien Tesla sigue siendo un referente entre los fabricantes de vehículos eléctricos, sus acciones han experimentado periodos de volatilidad, algunos impulsados ​​por factores macroeconómicos (tipos de interés, cadenas de suministro, competencia, regulación), otros por noticias específicas de la compañía. En cambio, la riqueza de Ellison, aunque también basada en acciones, se vio impulsada por un drástico resultado corporativo de Oracle ese mismo día. Así, cuando el impulso de las acciones de Oracle se disparó, las ganancias de Ellison superaron brevemente a las de Musk. Pero cuando el impulso se enfrió un poco, las inversiones más estables (relativamente hablando) de Musk le permitieron recuperar el liderazgo.

Implicaciones y lo que esto revela

Este evento es más que una simple curiosidad en las listas de multimillonarios. Ofrece información sobre varias tendencias importantes:

La fragilidad de la riqueza en papel.
Gran parte de lo que define a la “persona más rica” ​​son las ganancias no realizadas: el valor de sus inversiones en papel, no lo que han vendido o adquirido. Por lo tanto, una sola publicación de resultados o un movimiento bursátil puede cambiar drásticamente la clasificación del patrimonio neto.

La IA, la nube y la infraestructura son las nuevas fronteras.
Empresas como Oracle, antes consideradas más como proveedores tradicionales de software empresarial, ahora son juzgadas por su capacidad para competir en infraestructura de IA. El salto de Oracle demuestra que los inversores perciben las empresas de IA/nube como grandes mercados potenciales, y que Oracle ya no es solo tecnología “heredada”.

La velocidad de las reacciones del mercado. La volatilidad en los mercados modernos, especialmente en los tecnológicos, es excepcionalmente alta. Las noticias, los pronósticos e incluso los rumores pueden causar grandes fluctuaciones. El caso Oracle-Ellison es un ejemplo reciente: resultados, pronósticos, especulación del mercado y, finalmente, una reversión, todo en cuestión de horas.

Percepción y marca de la riqueza.
En la mente pública, Elon Musk ha sido durante años el rostro de una ambición tecnológica extrema: coches eléctricos, cohetes, redes sociales, IA. Ellison, en cambio, ha tenido un perfil mediático personal más bajo en los últimos años. Este momento cambió brevemente esa narrativa: después de todo, la riqueza no se trata solo de estatus, sino de percepción pública, cobertura mediática y narrativa.

Riesgos, limitaciones y contexto más amplio

Es importante tener en cuenta varias advertencias:

El patrimonio neto no es liquidez. Incluso para quienes tienen participaciones de cientos de miles de millones, convertirlas en efectivo no es trivial: existen implicaciones fiscales, impacto en el mercado y escrutinio regulatorio. Gran parte del valor percibido está vinculado a acciones, que pueden fluctuar considerablemente.

Sostenibilidad vs. Ganancias Excepcionales.
El auge de Oracle se debió a una combinación de mejores resultados reales y proyecciones a futuro. Si el rendimiento futuro no coincide con el optimismo infundado, los precios de las acciones podrían corregirse aún más, poniendo en riesgo parte de esas ganancias.

Amenazas regulatorias, competitivas y macroeconómicas.
Para Musk y Tesla, las amenazas incluyen el escrutinio regulatorio, la creciente competencia en vehículos eléctricos e inteligencia artificial, problemas en la cadena de suministro, costos energéticos y riesgo geopolítico (especialmente con China y otros mercados importantes). Para Oracle, los desafíos incluyen competir con Microsoft Azure, Amazon Web Services, Google Cloud, Nvidia, etc., tanto en tecnología como en precios.

Por qué esto importa más allá de las clasificaciones de multimillonarios

Aunque el titular “La persona más rica” pueda parecer trivial, las implicaciones son más amplias:

Señales de estrategia corporativa: Los resultados de Oracle y el auge de Ellison se consideran una prueba de que las inversiones de Oracle en IA/nube están dando sus frutos. Otras empresas podrían seguir su ejemplo con mayor dinamismo.

Comportamiento del inversor: el apetito por el riesgo, la creencia en el crecimiento de la infraestructura de IA y la disposición a pagar por perspectivas futuras se recalibran cuando se producen ganancias tan pronunciadas.

Conciencia de la volatilidad del mercado: para los responsables de las políticas, las instituciones financieras y los administradores de patrimonio, estas fluctuaciones plantean preguntas sobre la estabilidad, el riesgo sistémico y la forma en que los sistemas de información financiera, divulgación e impuestos rastrean o abordan los grandes y rápidos cambios en la riqueza.

Percepciones públicas y políticas de la riqueza: Estos eventos alimentan debates sobre la desigualdad, la tributación de las ganancias de capital y si la “superriqueza” depende demasiado de los caprichos del mercado. Cuando alguien puede ganar o perder decenas de miles de millones en cuestión de horas, ¿qué implicaciones tiene esto para la equidad, la transparencia o la regulación?

¿Que sigue?

Es probable que la tensión entre Musk y Ellison (y, por extensión, con otros magnates tecnológicos) continúe. Se están observando varios aspectos clave:

Próximos resultados de Oracle: ¿se mantendrá el crecimiento al ritmo que justificó el aumento?

Ejecución de contratos de nube e IA de Oracle: nuevos logros, infraestructura, talento, confiabilidad.

El desempeño de Tesla: cifras de entrega, presiones de costos, nueva competencia.

Interés del mercado en la infraestructura de IA versus la tecnología de consumo: contratos lucrativos, limitaciones en el suministro de chips, marcos regulatorios y riesgo geopolítico.

Metodología de los índices de riqueza: con cambios cada vez más rápidos, ¿qué tan “en tiempo real” o “sólida en efectivo” debe ser la riqueza para que se tenga en cuenta en estas clasificaciones?

Conclusión

El breve destronamiento de Elon Musk como la persona más rica del mundo por Larry Ellison fue un espectáculo, pero fue más que un simple espectáculo. Fue una señal: en el ritmo acelerado de la economía tecnológica actual, grandes cambios en los negocios, la inversión y la percepción pueden ocurrir en cuestión de horas. La riqueza en la cima ya no se mueve con lentitud. Es volátil, ligada tanto a lo que las empresas han hecho como a las expectativas de los inversores.

Musk sigue siendo una de las personas más poderosas y ricas del mundo, pero su posición —en esta carrera de valoraciones— ahora depende aún más de la confianza de los inversores, su ejecución y las tendencias del mercado. Para Ellison, este momento será recordado tanto como un triunfo como un recordatorio de que, en las altas finanzas, las coronas son perecederas.