En un sorprendente giro de los acontecimientos que está sacudiendo tanto a Hollywood como a Silicon Valley, el actor Alec Baldwin habría perdido un enorme contrato de patrocinio de 86 millones de dólares después de hacer comentarios explosivos sobre el multimillonario tecnológico Elon Musk durante un panel de discusión en vivo en Los Ángeles.

El momento, ahora viral, se produjo durante un panel en la Cumbre de Global Voices, donde le preguntaron a Baldwin sobre la influencia de los líderes tecnológicos en la cultura estadounidense. ¿Su respuesta? Brutalmente directa. “Elon Musk es un completo idiota”, dijo Baldwin, provocando audibles exclamaciones de asombro en el público. “No puedo vivir en un país gobernado por tipos así durante cuatro años más. Es agotador”.

Si bien Baldwin no es ajeno a las controversias, las consecuencias de esta declaración en particular fueron rápidas e implacables.El trato que desapareció

Fuentes cercanas al equipo de Baldwin confirmaron que el actor se encontraba en las últimas etapas de un acuerdo de patrocinio plurianual con  VertaLife , una prestigiosa marca de estilo de vida y bienestar con sólidas conexiones en las industrias del entretenimiento y la tecnología. Según informes, el acuerdo ascendía a 86 millones de dólares a lo largo de cinco años, incluyendo campañas publicitarias, apariciones internacionales y una línea de productos de marca compartida.

Pero apenas 24 horas después de que los comentarios de Baldwin llegaran a los titulares, VertaLife canceló su emisión.

En un breve comunicado, la compañía declaró:
«VertaLife valora el diálogo respetuoso y el crecimiento mutuo. Ante las recientes declaraciones del Sr. Baldwin, que no se alinean con los valores de nuestra marca, hemos decidido dar por terminadas todas las negociaciones de colaboración».Reacción y apoyo

Las redes sociales estallaron en reacciones. Mientras algunos aplaudieron a Baldwin por decir lo que pensaba —especialmente los críticos de Musk—, muchos otros lo criticaron por “morder la mano que alimenta a Hollywood”, dada la creciente influencia de Musk en los medios, la exploración espacial y los vehículos eléctricos.

“Lo entiendo, Alec está harto. Pero hay una diferencia entre la frustración y desperdiciar una oportunidad de 86 millones de dólares”, tuiteó una fuente del mundo del espectáculo.

Otros cuestionaron si los comentarios de Baldwin eran una estrategia calculada para distanciarse de sus vínculos corporativos. “Quizás ya no le gusta Hollywood”, especuló un usuario de Reddit. “O quizás se creía intocable”.

El propio Musk no ha respondido directamente a los comentarios de Baldwin, pero publicó un tuit críptico pocas horas después de que se conociera la noticia:
«A veces, los críticos más acérrimos solo buscan un micrófono. ¡Mucha suerte para ellos!».

¿Un patrón de provocación?

Esta no es la primera vez que Baldwin se ve envuelto en la controversia. A lo largo de los años, el actor ha sido noticia por altercados con paparazzi, diatribas políticas y disputas legales de alto perfil. Pero perder un contrato de esta magnitud podría significar nuevas consecuencias en una industria del entretenimiento cada vez más consciente de las marcas.

La experta en relaciones públicas Dana Keller opinó: «En el panorama mediático actual, no se trata solo de lo que se dice, sino de dónde y cómo se dice. Cuando los patrocinadores ven volatilidad, ven riesgo, y 86 millones de dólares es un riesgo enorme».

¿Qué sigue para Baldwin?

A pesar del revés, Baldwin se mostró imperturbable durante una entrevista posterior dos días después. “Siempre he dicho lo que creo”, declaró a  Entertainment Focus . “Si eso me cuesta algunos contratos, que así sea. Duermo mejor sabiendo que no tengo que fingir”.

Los fans están divididos: algunos admiran su audacia, mientras que otros cuestionan si la imagen pública de Baldwin resistirá otro golpe. Sea como sea, una cosa está clara: en una época donde una sola declaración puede costar millones, cada palabra importa.