Un fallo federal garantiza el acceso continuo a la atención médica esencial para millones de personas en medio de una batalla legal por la desfinanciación relacionada con el aborto.
Un juez federal ha bloqueado una disposición clave de la reciente ley fiscal de la administración Trump que tenía como objetivo detener los reembolsos de Medicaid a Planned Parenthood, una decisión que garantiza que la organización y clínicas similares continuarán recibiendo fondos federales críticos, por ahora.

La jueza federal de distrito Indira Talwani emitió el fallo el lunes desde Boston, ampliando una orden judicial previa, más restrictiva, emitida la semana anterior. La nueva orden protege a todas las clínicas de Planned Parenthood en todo el país, independientemente de si ofrecen servicios de aborto o cumplen con el umbral mínimo de reembolso de Medicaid de $800,000 anuales.

Tribunal Federal anula los aranceles de Trump y los declara inconstitucionalesCharlie Kirk’s Trump Tariff Tweet Slapped with Community Note

Leer más

La decisión forma parte de una impugnación legal más amplia interpuesta por Planned Parenthood Federation of America contra una disposición de la legislación fiscal impulsada por Trump. Dicha cláusula pretendía recortar los pagos de Medicaid durante un año a los proveedores de salud que ofrecen abortos y reciben importantes fondos federales, incluso si estos proveedores, como Planned Parenthood, también ofrecen una amplia gama de servicios médicos no relacionados con el aborto.

“Es probable que los pacientes sufran consecuencias adversas para la salud cuando la atención se interrumpe o no está disponible”, escribió la jueza Talwani en su fallo. “En particular, restringir la capacidad de los miembros para prestar servicios de salud amenaza con un aumento de embarazos no deseados y complicaciones asociadas debido al acceso reducido a anticonceptivos efectivos, y a un aumento de ITS sin diagnosticar ni tratar”.

Planned Parenthood había advertido que hasta 200 clínicas en 24 estados corrían el riesgo de cerrar si se aplicaban los recortes a Medicaid, lo que podría privar a más de un millón de pacientes del acceso a la atención médica. Estos servicios incluyen anticonceptivos, pruebas de detección de cáncer, pruebas de embarazo y tratamiento de ITS, un apoyo crucial, especialmente para las comunidades de bajos ingresos y marginadas. Casi la mitad de los pacientes de Planned Parenthood dependen de Medicaid.

La jueza Talwani fue cuidadosa al señalar que su decisión no obliga al gobierno federal a financiar abortos electivos ni ningún servicio de atención médica que no esté cubierto por Medicaid. En cambio, impide que la administración niegue el reembolso a proveedores calificados por su vinculación con servicios de aborto o debido a umbrales de financiación arbitrarios.

El fallo marca una importante victoria temprana para Planned Parenthood y sus aliados en una batalla que finalmente puede llegar a tribunales superiores, especialmente dadas las decisiones anteriores de la Corte Suprema de Estados Unidos que permiten a los estados excluir a la organización de los programas de Medicaid.

Mientras se desarrolla el caso, las clínicas de Planned Parenthood permanecen abiertas y financiadas, preservando un sustento vital para los pacientes de todo el país.