Cristian Odal presentó papeles de divorcio hace 3 días, documentos legales entregados a Ángela Aguilar el 22 de noviembre de 2025 y según fuentes legales cercanas al caso, ella se niega completamente a firmarlos. No estamos hablando de rumores, estamos hablando de documentos oficiales preparados por el bufete de abogados más caro de Los Ángeles, de un proceso legal que ya comenzó y de una batalla que se está volviendo cada vez más fea detrás de las puertas cerradas.
Hoy vamos a revelar exactamente qué dicen esos documentos de divorcio, cuánto dinero Nodal quiere quedarse, qué cláusulas devastadoras incluyó, por qué Ángela se niega a afirmar a pesar de que su matrimonio claramente está destruido y la reacción de Pepe Aguilar cuando se enteró de los términos que Nodal está exigiendo.
También vamos a mostrar qué abogados contrató Ángela para pelear esto.
Oye, estos detalles legales son exclusivos de fuentes dentro de los bufetes involucrados.
Información que las familias quieren mantener sellada.
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Todo comenzó el 20 de noviembre de 2025, dos días después de que Ángela fuera hospitalizada por su crisis nerviosa.
Mientras ella estaba en el Sedar Siní Medical Center luchando por su salud mental, Nodal estaba en Miami reunido con abogados de divorcio.
Según fuentes que tienen acceso directo a su equipo legal, Nodal contrató al bufete Baseman y Asociates.
Es uno de los tres bufetes de divorcio más caros y agresivos de Estados Unidos, especializados en divorcios de celebridades de alto perfil. Han manejado casos de actores de Hollywood, músicos famosos, deportistas millonarios.
Su tarifa inicial es 75,000 peso para aceptar el caso.
Luego cobran 850 pesos por hora de trabajo legal.
Y en divorcios complejos como este, fácilmente pueden acumular dólar 300,000-500,000 en honorarios totales.
Que Nodal haya contratado este nivel de representación legal dice una cosa clara, esto va a ser guerra, no va a ser divorcio amigable, va a ser batalla por cada dólar, cada propiedad, cada detalle.

La primera reunión entre Nodal y sus abogados duró 4 horas el 20 de noviembre.
Según filtraciones, Nodal llegó con una lista específica de lo que quería.
“No quiero darle nada”, habría dicho al socio principal del bufete.
Ella destruyó mi imagen. Ella causó que perdiera contratos. Ella me usó. No merece un centavo.
Los abogados le explicaron que legalmente no es tan simple.
Están casados bajo leyes de California, un estado de propiedad comunitaria.
Todo lo adquirido durante el matrimonio se divide 50/50 a menos que haya acuerdo prenuptial.
Y ahí está el problema devastador para Nodal. No hay acuerdo prenuptial.
No firmaron nada antes de casarse. Fue boda rápida, impulsiva, sin protecciones legales.
Ahora Nodal está pagando el precio de esa impulsividad.
Pero aquí está lo interesante. Los abogados le preguntaron a Nodal por qué no firmaron Prenuptial. Su respuesta fue reveladora.
Ángela insistió en que no lo necesitábamos. Decía que el prenub significaba que no confiábamos el uno en el otro, que nuestro amor era para siempre.
Yo no quería empezar el matrimonio peleando por eso. Entonces dií.
Eso muestra que Ángela, irónicamente, fue quien rechazó la idea del prenuptial.
Pensaba que protegería el romance.
Ahora esa decisión la está perjudicando a ella tanto como a Nodal.

Los documentos de divorcio fueron preparados en 36 horas.
Un equipo de cuatro abogados trabajando tiempo completo para redactarlos. El 22 de noviembre a las 2 de la tarde los papeles fueron entregados oficialmente a Ángela. Pero aquí está el detalle dramático.
Ángela todavía estaba en el hospital cuando los recibió.
Había sido dada de alta esa mañana después de estar internada en psiquiátrico. Llegó a su casa en Los Ángeles alrededor de las 11 de la mañana. 3 horas después, un notario tocó la puerta.
Según empleados de la casa que presenciaron la escena, Ángela abrió la puerta esperando tal vez flores o un paquete. En su lugar encontró a un notario profesional con un sobremila grande. Ángela Aguilar Nodal, preguntó el notario formalmente. Tiene que firmar por recepción de estos documentos legales.
Ángela firmó el recibo confundida, sin saber realmente qué era.
Abrió el sobre ahí mismo en la puerta y cuando vio las palabras Petis Chen Ford y Luchen of Mary en la primera página con letras grandes y oficiales, su cuerpo entero se congeló.
Leyó la primera línea Cristian Jesús González Nodal, Petichene vs Ángela Aguilar Nodal respondent Petis Chen for Chen of Mary. La palabra respondent la golpeó. Ni siquiera era la persona iniciando el divorcio, era la persona respondiéndolo, la persona siendo dejada. Colapsó.
Literalmente se dejó caer al piso del porche llorando.
El notario, incómodo, preguntó si estaba bien.
Ella no podía responder, solo lloraba incontrolablemente.
Anelis, quien estaba con ella en la casa preparándote en la cocina, corrió al escuchar el llanto fuerte. Encontró a Ángela en el piso de la entrada con papeles de 48 páginas regados alrededor de ella, completamente histérica.
“Me está divorciando”, repetía entre sollozos desgarradores.
“Nodal me está divorciando. No me llamó, no me avisó, solo envió papeles como si yo no importara nada, como si nunca hubiera significado nada para él”.
Anelisa ayudó a Ángela a entrar a la casa. La sentó en el sofá, intentó calmarla con palabras reconfortantes, pero Ángela estaba inconsolable. Salí del hospital hace 3 horas. 3 horas.
y ya me estaba esperando esto.
¿Qué tipo de persona hace eso? ¿Qué tipo de esposo divorcia a alguien el mismo día que sale de psiquiátrico? Anelis no tenía respuesta porque, honestamente, era cruel más allá de cualquier justificación.