El mundo de los vehículos eléctricos está tambaleándose después de que ayer estallara un escándalo masivo que involucró al producto estrella de Tesla, el Cybertruck, enviando ondas de choque a través de la compañía y obligando a Elon Musk a lo que los expertos describen como un “colapso total”.

El escándalo que lo rompió todo

La controversia se centra en las recientes revelaciones de que los modelos Cybertruck 2.0 de Tesla , que comenzaron a distribuirse el mes pasado, presentan graves problemas de seguridad y rendimiento. Surgieron múltiples informes que afirman:

Incidentes de sobrecalentamiento de baterías que provocaron incendios espontáneos en varios vehículos

Fallos del piloto automático provocan cuasi accidentes en las carreteras

Fallos de software que desactivan funciones de seguridad críticas durante el uso

Recopilación no autorizada de datos de conductores sin consentimiento

Estos informes fueron compilados inicialmente por un grupo de denunciantes dentro de la división de fabricación de Tesla y filtrados a los principales medios de comunicación, lo que provocó la indignación tanto de los clientes como de los reguladores.

La reacción de Elon Musk: un colapso público

Fuentes cercanas a Musk describen la respuesta del CEO de Tesla como volátil y extrañamente emotiva.

Tras la filtración, Musk supuestamente canceló todas sus apariciones públicas y reuniones internas, refugiándose en un periodo de silencio de varias semanas.

Sin embargo, cuando finalmente se dirigió a los medios en una transmisión en vivo organizada apresuradamente, su comportamiento fue errático, alternando entre arrebatos defensivos y momentos de visible frustración.

“Estas son noticias falsas”, declaró Musk. “Nuestros vehículos son seguros, y quien diga lo contrario miente o no entiende la tecnología”.

Pero su retórica encendida sólo alimentó las especulaciones sobre la gravedad de la crisis interna.

Los reguladores y los clientes exigen respuestas

La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) ya ha iniciado una investigación formal y varios propietarios de Cybertruck descontentos han presentado demandas colectivas que exigen retiradas del mercado y compensaciones.

Las acciones de Tesla se desplomaron, desplomándose casi un 15% en un solo día , perdiendo miles de millones de dólares en valor de mercado.

Mientras tanto, las redes sociales están inundadas de videos de propietarios de Cybertrucks documentando problemas y exigiendo responsabilidades.

¿Qué sigue para Tesla?

Los analistas del sector advierten que este escándalo podría marcar un punto de inflexión para el dominio de Tesla en el mercado de vehículos eléctricos.

«La marca Musk siempre se ha basado en la innovación y la confianza», declaró la experta en automoción Lisa Tran. «Si esa confianza se erosiona, la competencia se abalanzará sobre ella».

Mientras tanto, rivales como Ford y Rivian están aprovechando los problemas de Tesla con agresivas campañas de marketing que enfatizan la seguridad y la confiabilidad.