En un momento asombroso que ha enviado ondas de choque a través de las redes sociales, Elon Musk se encontró en el centro de una acalorada controversia luego de un episodio reciente de The View.

Durante una transmisión en vivo, los presentadores del programa hicieron una serie de comentarios mordaces sobre el hijo de 4 años de Musk, X Æ A-Xii, lo que provocó una respuesta feroz e inesperada del empresario multimillonario.

El drama se desarrolló cuando los copresentadores Whoopi Goldberg, Joy Behar y Sunny Hostin comenzaron a discutir el estilo de crianza de Musk de una manera poco favorecedora.

“¿Qué clase de padre deja que su hijo sea el centro de atención de esta manera?” Behar se burló, mientras que Goldberg agregó: “Es simplemente irresponsable, especialmente para un niño tan pequeño”.

Los comentarios se intensificaron rápidamente, con los presentadores haciendo comentarios sarcásticos sobre el nombre único y la atención que atrae.

Los espectadores observaron con incredulidad cómo la conversación se tornaba cada vez más personal. Musk, conocido por sus respuestas sin filtro en redes sociales, claramente no iba a dejar pasar los comentarios.

Mientras se transmitía el episodio, recurrió a Twitter para expresar su indignación, tuiteando: “Atacar a mi hijo es pasarse de la raya. No lo toleraré. #ProtectX”.

Su tuit se viralizó rápidamente, acumulando miles de “me gusta” y retuits, con muchos fans y seguidores apoyándolo.

“¡Elon tiene razón! ¡Dejen a los niños fuera!”, comentó un usuario, mientras que otro añadió: “The View se ha pasado esta vez”. La reacción contra los presentadores fue inmediata e intensa, y muchos pidieron boicotear el programa.

Pero la respuesta de Musk no terminó ahí. En una decisión inesperada, anunció que aparecería en  The View  en un segmento especial para abordar la controversia directamente.

“Estaré allí para hablar sobre la crianza, el respeto y la importancia de proteger a nuestros hijos”, declaró en un tuit posterior. Este anuncio provocó un frenesí en internet, con los fans esperando con ansias lo que Musk diría en directo.

A medida que la tensión aumentaba,  los productores de The View  , según se informa, estaban preocupados por las posibles consecuencias de la aparición de Musk.

Fuentes cercanas al programa revelaron que los equipos legales estaban considerando opciones para proteger a los presentadores de cualquier reacción negativa.

“Les preocupan las demandas por difamación y cómo esto podría afectar sus índices de audiencia”, reveló una fuente.

El equipo de producción se apresuraba a prepararse para lo que podría convertirse en uno de los episodios más explosivos en la historia del programa.

Cuando finalmente llegó el día, el estudio bullía de anticipación. Musk entró al set con su confianza característica, y el ambiente era electrizante.

Los presentadores, visiblemente tensos, intentaron desviar la conversación hacia temas más ligeros, pero Musk no se dejó engañar. “Hablemos de lo que realmente sucedió aquí”, dijo, yendo directo al grano.

La discusión que siguió fue intensa y emotiva. Musk defendió con vehemencia a su hijo, enfatizando la importancia de protegerlos de las críticas públicas.

«Mi hijo merece una infancia libre de escrutinio. Todos deberíamos proteger a nuestros hijos, no denigrarlos por diversión», afirmó.

La tensión en el estudio era palpable, con el público pendiente de cada palabra. Los presentadores intentaron desviar la conversación, pero la determinación de Musk de abordar el tema directamente los dejó desconcertados.

“Lo que dijiste fue hiriente y debe reconocerse”, añadió, responsabilizándolos por sus palabras.

Al concluir el episodio, quedó claro que las consecuencias de este encuentro repercutirían mucho más allá del estudio.

La respuesta del público fue abrumadora, con muchos elogiando a Musk por su postura contra el acoso escolar y pidiendo un diálogo más respetuoso sobre la crianza y la familia.

La situación ha generado un debate más amplio sobre las responsabilidades de las figuras públicas y los medios de comunicación al hablar de niños.

Mientras se calma la situación, queda por ver qué consecuencias tendrán The View y sus presentadores, pero una cosa es segura: la inesperada represalia de Elon Musk ha dejado una huella imborrable en el panorama de la televisión diurna.